martes, 13 de abril de 2010

Una realidad que cuesta



En estos días y no tan pocos,
tan locos y divertidos,
tan buenos y desgarradores,
aprendí mucho de vos,

si ya las almas se compenetran,
o será que te siento a mi lado,
no llevo la cuenta de cuanto haya dado,
pero hago memoria de lo que aprendí,

me perdí en tu belleza,
y morí en el dolor dejándome un buen recado,
ni se cuales son todas estas cosas,
algunas melosas y otras asesinas,
algunos recuerdos de esquinas,

cuando estuve con vos aprendí del amor,
y cuando estábamos a espaldas,
sentí el dolor,
vi por la ventana, de afuera para dentro,
y hoy me encuentro perdido en alguna calle,

las gotas ya no mojan como antes,
el silencio taladra mi cabeza,
no me importan cuantos puchos,
mientras calmen la ansiedad,

pero después de ser tan ciego,
asimilo la realidad,
y en verdad debo decir,
que ya nunca vas a volver..

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